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Foto cortesía Youtube |
El que conversa hasta por los codos, el que se quiere colar, el justiciero y los EPA´s, son algunos de los personajes con los que te puedes topar a la hora de hacer una extensa fila para retirar dinero en uno de los cajeros venezolanos
Los que hablan mucho : este tipos de individuos son una especie de propiedad intelectual ambulante y cada tres minutos hablan de un tema distinto, por lo general suelen ser abiertos y amables. Si te consigues con uno de ellos, la cola se te hará más corta en el cajero o quizá te fastidies te tanto escucharlo.
El pacifista optimista : por más que se le coleen o vea que una persona se está demorando mucho en el cajero, él no hace nada y piensa que vale la pena esperar , y que por eso no va a estresarse.
Los justicieros : suelen llevar la sangre de caudillo en las venas . Son capaces de armar una revolución y alborotar a todas las personas de la cola para evitar que alguien se colee, su lema es “ señor/a haga la colita igual como todos la hacemos”.
Los que hacen campaña: pareciera que siempre tuvieran un discurso balo la manga para hablar acerca de la situación del país , y le recriminan al gobierno cada segundo que demora una persona retirando el dinero, por estás temporadas es común escucharlos decir “por esta y más razones hay que salir al votar el 6 de Diciembre”
Los epa: de tandas veces que han pronunciado la frase: ¡Epa, la cola es atrás!, ya lo dicen con una persuasión, proyección y modulación perfecta que deja sin más opciones a la persona que se quiere colocar en el primer lugar de la fila, a ocupar el último lugar en la cola
El invisible : Estos son los más peligrosos y parecieran que tuvieran poderes invisibles. Por lo general suelen aparecer de la nada y aprovecharse de los pacifistas optimistas para colarse en el primer puesto , a menudo suelen llevarse mal con Los Justicieros y Los Epa, también suelen sostener discusiones en voz alta con los mismos cuando se quieren colar.
El fruncidor de ceño silencioso: siempre voltea para atrás para mostrarle el disgusto
con el rostro a la persona que lo precede detrás de la fila. Este individuo por
más molesto que esté nunca dirá una palabra, ya que la única forma de mostrar
disgusto es con el rostro.